viernes, diciembre 11, 2015

En las manos de unos monstruos

Todos tenemos una brújula moral, una lista de principios invisibles aprendida de nuestros ancestros, amigos, profesores, ejemplos diarios a lo largo de la infancia y la adolescencia, e incluso la juventud. Otros son juicios formados "libremente" por nuestra consciencia y pensamiento filosófico y/o lógico que nos aplicamos diariamente. Y no todas esas listas son limpias, ni puras, ni perfectas. Qué demonios, probablemente tengan más agujeros y fallos que el Titanic después del iceberg.